Información agroclimática para construir resiliencia en Panamá
Panamá posiciona la acción climática como una necesidad de primer nivel y una prioridad dentro de los procesos de planificación nacional para adaptarse y mitigar el cambio climático. Se están implementando nuevas estrategias, entre las que se encuentra la creación de un sistema de información agroclimática, que incluye las Mesas Técnicas Agroclimáticas (MTA), para orientar, planificar y promover su sector agrícola.
El aumento de las temperaturas, los periodos de sequía y los cambios en el régimen de lluvias en el Corredor Seco Centroamericano están teniendo un gran impacto en el desarrollo y la productividad de los cultivos, lo que se traduce en una reducción de las cosechas para el sector agrícola, así como en importantes pérdidas económicas para los productores y la economía regional.
Considerando los impactos de la variabilidad climática y el cambio climático en la región, Panamá estableció en las metas establecidas en la ‘’Contribución Determinada a Nivel Nacional de Panamá (CDN1)’’, en el marco del Acuerdo de París, nuevas estrategias de adaptación y mitigación del cambio climático para crear un sector agrícola más sostenible y productivo.
Panamá ya está dando sus primeros pasos hacia este objetivo. Recientemente ha finalizado el curso de formación "Análisis de datos para la toma de decisiones agroclimáticas en Panamá". Su objetivo fue fortalecer la resiliencia climática a nivel local y regional, para un desarrollo sostenible y de bajas emisiones, a través del desarrollo de capacidades en diferentes temas como la interpretación de datos climáticos, modelos de simulación de cultivos y herramientas de monitoreo de información agroclimática.
Instituciones que participaron en el curso
El curso se llevó a cabo a través de las MTA de Panamá, en las provincias de Herrera, Veraguas, Coclé, Chiriquí y Los Santos, el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA), en conjunto a la Empresa de Transmisión Eléctrica S.A. (ETESA), Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), Fundación para la Conservación de los Recursos Naturales (NATURA), el Programa de Investigación de CGIAR en Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria (CCAFS) y la Alianza Bioversity Internacional y el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT), con el apoyo del Programa Nacional Fondo de Adaptación.
Contenidos y reacciones sobre la capacitación
El contenido de este curso brindó un panorama amplio de cómo construir, diseminar y analizar la información climática que se requiere, como se procesa y se aplica en modelos de simulación de cultivos, como definir fechas de siembra y cómo se puede obtener información por parte de los productores haciendo uso de diversas herramientas tecnológicas de información y comunicación.
En la capacitación participaron 28 técnicos especialistas y profesionales de diferentes instituciones de gobierno, académicas y cooperación del país. A continuación, les mostramos las impresiones de algunos de los participantes sobre el curso:
‘’Decidí integrarme porque yo acabo de terminar mis estudios en la facultad de ciencias agropecuarias, y como egresada sentí que el curso cumplía con todos los objetivos en los que un egresado quisiera capacitarse, sobre todo para mí que estoy entrando al ámbito laboral. Apenas vi el contenido, dije esto está buenísimo para cualquier aplicación laboral a la que quisiera optar, ya sea en el área de meteorología, agricultura e incluso talvez gestión de recursos hídricos’’.
Eymmis Jaén - Ingeniera en manejo de cuencas y ambiente de la Universidad de Panamá.
‘’Yo decidí integrarme en éste curso para adquirir la capacidad de transmitir de una manera asertiva los conocimientos de las diferentes variables meteorológicas y así poder orientar a los técnicos y productores cómo influye el comportamiento de las diferentes variables climáticas en las actividades agrícolas’’.
Vianca Benítez- Analista de Meteorología del departamento de Hidrometeorología de ETESA.
‘’Tenemos personal en el ministerio que va a requerir algo de éstas herramientas, cómo/porqué se utilizan y los productos que se generan a partir de éstas, esa sería en primera instancia una pequeña réplica con un grupo de técnicos del ministerio. Posteriormente estaríamos elaborando nuestros propios pronósticos, análisis de información agroclimática para cada mesa y generando información más específica y más concreta para establecer las recomendaciones para los productores’’.
Héctor Pérez- Dirección de Agricultura, Componente Agroambiental del MIDA.
Para el cierre del curso se contó con la participación del ministro de Desarrollo Agropecuario de Panamá Augusto Valderrama, y con Jesús Quintana, director para las Américas de la Alianza: "Esperamos a partir de ahora, poder brindar acompañamiento a la oficina de data agroclimática del MIDA y seguir apoyando las Mesas Agroclimáticas, para generar esa información e influir en tener mejores políticas que respondan mejor a los retos ante el cambio climático".
Trabajar por más MTA
Cómo próximos pasos se espera que los conocimientos y herramientas adquiridos puedan ser replicados a nivel nacional para el desarrollo de las MTA, con el fin de que puedan generar información oportuna y de fácil acceso, que contribuyan a mejorar las tomas de decisiones a nivel local para el manejo de cultivos, desarrollando e implementando acciones que apunten a la resiliencia climática y la sostenibilidad.
"Hay que continuar reforzando estos conocimientos, con la aplicación práctica. Los técnicos deben familiarizarse más con estos servicios de información climática. Hemos encontrado un ambiente muy abierto a propiciar estos cambios en las funciones de especialistas y técnicos y por ende también en los productores", concluyó Carlos Zelaya, facilitador del curso y especialista en Agrometeorología de la Alianza Bioversity-CIAT y CCAFS.
Cursos como este permitirán a Panamá utilizar la información agroclimática para orientar, planificar e impulsar diferentes acciones en el sector agropecuario que permitan un desarrollo productivo y sostenible, basados en los pronósticos climáticos. Esto significa, de acuerdo a su NDC, establecer estaciones meteorológicas y reunir todos datos sobre el clima de su territorio, que puedan ser utilizados en las MTA, para alcanzar una mayor productividad, reducir el riesgo climático y mitigar los efectos de la variabilidad climática.