News

Reducir el riesgo climático en Honduras: Todos ponen y todos ganan

La gestión del recurso hídrico es uno de los ejes estratégicos para reducir el riesgo climático y la vulnerabilidad de la agricultura, pero requiere enfoques sistemáticos e integrados. Foto: N. Palmer
Si hay algo peor que soportar los estragos del cambio climático, es no estar preparado para ellos. Ese no será más el caso de Honduras, que decidió ‘organizar la casa’ y buscar sinergias e interacciones entre diferentes entidades para adaptarse y mitigar los efectos del clima.

La agricultura de Honduras es una de las más afectadas por el cambio climático: fenómenos naturales, sequías, plagas y cambios extremos en la temperatura, disminuyen el rendimiento de los cultivos y amenazan la seguridad alimentaria de este país de América Central, que además se suma con un alto índice de riesgo climático, según el estudio de Germanwatch, que catalogó al país como el más vulnerable entre 1992 y 2011.

Igualmente, el cultivo de granos básicos se ve perjudicado por la variación en la época de lluvias y en el incremento de plagas y enfermedades que se han propagado por la variación climática. Cultivos como el café, han tenido afectaciones como el incremento de plagas (en especial la roya), floraciones en épocas atípicas, migración de las zonas óptimas y la pérdida de fertilidad en los suelos.

Documento base de trabajo del tallerEstas son algunas de las reflexiones de un documento de trabajo elaborado por el Programa de Investigación de CGIAR en Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria (CCAFS) en conjunto con la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) sobre el estatus de la gestión de riesgos climáticos en el sector agroalimentario, en colaboración con y el Consejo Agropecuario Centroamericano (CAC) y el CIAT, que además destacó la necesidad de articular las acciones de los diferentes actores, públicos y privados que trabajan en el país en la gestión del riesgo climático, la agricultura y seguridad alimentaria.

En el marco de la presentación del documento, se realizó un taller recientemente cuyo propósito fue elaborar una agenda conjunta que apoye la Política de Cambio Climático y Gestión de Riesgos para el sector, y facilitar la alineación, coordinación y complementariedad de las diferentes iniciativas presentes y futuras.

El taller contó con la participación de más de 50 personas, entre técnicos y representantes de los diferentes actores gubernamentales, ONG y agencias de cooperación internacional como el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), quien fue co-organizador del evento. El viceministro de la SAG, José Luis Osorio, destacó la importancia del evento:

Este taller es sumamente importante porque el cambio climático afecta los períodos y la intensidad de las lluvias o sequias y en Honduras, el 70 por ciento de la población que se dedica a la agricultura, lo hace de forma tradicional, es decir, en la temporada seca se dedica a preparar la tierra y espera las lluvias, porque no tiene sistemas de riego, depende directamente de la lluvia.

Después de la presentación, los asistentes se dividieron en los ejes temáticos definidos en el documento como claves para la SAG. Un moderador en cada mesa lideraba la discusión en torno a que se está trabajando en cada sector, qué falta por hacer y cuáles serían los próximos pasos.

Gracias a esto, los participantes del taller reconocieron la importancia de alinear sus actividades en ejes específicos para garantizar mejores resultados y maximizar el uso de los recursos; de ahí la importancia de desarrollar una agenda de trabajo conjunta de corto y mediano plazo. Igualmente, se comprometieron con retroalimentar el documento con el fin de robustecerlo y usarlo como texto guía en el marco de dicha agenda.

Los moderadores lideraron la discusión en torno a los ejes temáticos. Foto: J.L.Urrea

Por su parte, el compromiso de la SAG es liderar la articulación nacional/regional en materia de cambio climático y gestión del riesgo en el sector agropecuario, especialmente en aspectos relacionados con el marco institucional y de políticas; y de manera conjunta con la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), velará por la articulación de las acciones a la Política Nacional de Gestión Integral del Riesgo.

La agenda se definió en los siguientes ejes: gestion del conocimiento, gestion del suelo, gestion del recurso hidrico y fitomejoramiento. Un eje adicional surgió en medio de las discusiones, para tratar los temas transversales en torno a mecanismos financieros e institucionales para el conocimiento del riesgo y monitoreo del clima, la reducción del riesgo de desastres y adaptación al cambio climático; la atención de desastres y recuperación.

Esta iniciativa, promovida por CCAFS y sus socios, logró converger diferentes entidades que estaban actuando por separado y principalmente de manera reactiva frente a los desastres, a trabajar de manera integrada, evidenciando que abordan problemas comunes y por lo tanto, muchas soluciones en común; pasando de una atención ‘post-desastre’a una gestión más integral del riesgo climático.

Galería de imágenes del taller

Así reportaron los medios de Honduras el taller:

José Luis Urrea es Analista de Comunicaciones para América Latina del Programa de Investigación de CGIAR en Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria (CCAFS).

Para actualizaciones del programa CCAFS en español, síganos en Twitter: @Cgiarclimate_LA