Mujer: productora e investigadora
Semilla mejorada, abonos orgánicos y cosechas de agua son algunas de las tecnologías que se encuentran en la parcela de Mariela Arteaga
Una hermosa sonrisa combina con sus grandes ojos, y en tono amistoso nos da la bienvenida a su finca de tres hectáreas y media donde siembra pastos mejorados de corte, hortalizas y árboles frutales… Mariela Arteaga, una joven que se destaca por ser una proactiva productora en su comunidad El Boneño, en el municipio de Diriamba, en Nicaragua. Frente a su vivienda, dos pilas de concreto almacenan entre ambas 110 barriles de agua para el riego de sus cultivos y aunque no lo crea, cultiva tilapias en su interior como controladores biológicos para erradicar los zancudos.
Mariela Arteaga es una innovadora productora, asistida por el Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA), cuya finca es un espacio de intercambio de saberes ancestrales y conocimiento científico, con prácticas agroecológicas y manejo sostenible de los recursos naturales de la Madre Tierra.
Con la misma humildad que caracteriza a las mujeres productoras, relató su primera experiencia en participar de los procesos investigativos con el INTA: “el año pasado tuve una área de validación tecnológica (AVT) de las variedades de frijol 'INTA Fuerte Sequía' (una variedad de frijoles resistentes a la falta de agua, tolerante al calor y de rápida cosecha, que en menos de 80 días ya genera producción) y de tomate 'SER 16'; la experiencia fue muy buena porque nunca había sembrado tomate”.
En tomate se investigó el control de la mosca blanca y la resistencia de la semilla SER 16 en la zona seca. Esta investigación tuvo buenos resultados porque el cultivo se desarrolló sin plagas con manejo agroecológico y la cosecha fue de 35 cajillas de tomate por hectárea.
Por su parte, la investigación en frijol INTA Fuerte Sequía confirmó que el uso de semilla mejorada en lugar de “granos” para sembrar es la mejor opción, ya que alcanzaron rendimientos de hasta 1.8 toneladas por hectárea, cuando el promedio en la comunidad es apenas de 0.7 toneladas, según Pedro Bustos, técnico de innovación del INTA para el municipio de Diriamba.
Alimentación para el ganado
Es verano y los vientos fuertes azotan los pastos de 'Gamba', 'Taiwán', 'Camerún', y 'Estrella' que se ven a corta distancia entre la parcela; son las vacas en su corral que están listas para ser alimentadas con estos pastos picados recién cortados… en abril comerán los mismos pastos ensilados con melaza para que sean más apetecibles.
“Vamos a elaborar bloques multinutricionales y amonificación con los rastrojos de maní, sorgo, y frijol que guardamos de la cosecha”, expresó Mariela, mientras señalaba los montones que se encuentran apilados detrás de la vivienda.
Además de los temas anteriores también será capacitada en fabricación de ensilajes, concentrados caseros para ganado mayor y menor, subrayó Medardo Dinarte, delegado para el departamento de Carazo del INTA.
Para este año la joven productora, elaboró un Plan de finca en coordinación con el INTA, para el cual tiene programa hacer 400 metros de curvas a nivel, acequias, sembrar barreras vivas, y elaborar las aboneras orgánicas.
“Ahora las familias productoras contamos con el apoyo del INTA, yo no sabía nada; estoy aprendiendo poco a poco y estamos agradecidos porque se ha preocupado por nosotras para que tengamos fincas autosostenibles”, finalizó Arteaga.
Maricely Linarte es editora del Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria. Este texto fue reproducido con permiso del autor de su publicación en la página web del INTA. Ver el original. La opinión del autor no necesariamente refleja las opiniones de CCAFS.
Editado por José Luis Urrea, Oficial de Comunicaciones de CCAFS América Latina.